Reinterpretación de la nasalización en terena, cubeo y chimila desde la Fonología Natural
Ikusi/ Ireki
Data
2014-11-07Egilea
Díaz Romero, Camilo Enrique
Laburpena
De acuerdo con Piggott (1992) y Piggott y van der Hulst (1997), los fenómenos de
nasalización en las lenguas del mundo se pueden dividir entre dos sistemas: el tipo A y
el tipo B, los cuales se distinguen por el tipo de dominio prosódico sobre el cual se
proyecta la nasalidad, que es sílaba en el primer tipo y morfema en el segundo. En el
modelo de Fonología Natural (Stampe, 1979; Donegan y Stampe, 1979; Dressler,
1984), existe una distinción fundamental entre alternancias sonoras que resultan de
procesos, los cuales resultan motivados fonéticamente, se pueden inhibir y están
condicionados fonológicamente, y alternancias sonoras procedentes de reglas, cuyo
condicionamiento es morfológico. En este estudio realizado entre tres lenguas
amerindias que no están emparentadas, chimila (Celedón, 1886; Malone, 2006; 2010;
Reichel-Dolmatoff, 1947; Trillos, 1993; 1994; 1997), cubeo (Berrío, 1982; Chacon,
2012; Ferguson et.al., 2000; Mountain, 1978; Morse et.al, 1999; Salser, 1973; Salser y
Salser, 1976) y terena (Bendor-Samuel, 1970; Butler, 2007; Martins, 2009; Neubaner,
2012; Rosa, 2010; Silva, 2009), se ha identificado la presencia del sistema de
nasalización tipo A solo en la lengua chimila, pero es el resultado de la inhibición del
proceso acontextual de desnasalización en las consonantes y la aplicación de una regla
morfofonológica de nasalización. En cuanto al terena y el cubeo, resultan ser lenguas
con el sistema de nasalización tipo B, pero, mientras que en el terena es el producto de
la inhibición del proceso de desnasalización en las consonantes para que emerja sonidos
nasales con estatus de fonema y la presencia de una regla morfofonológica de
nasalización condicionada por persona gramatical, en el cubeo es el resultado de la
inhibición del proceso de desnasalización para que surjan oposiciones entre morfemas
orales y nasales, así como la aparición de unas reglas morfofonológicas de nasalización
en los verbos.