Programa de educación para la salud hacia cuidadores de personas que hayan sufrido un accidente cerebrovascular
Abstract
El accidente cerebrovascular es una de las primeras causas de mortalidad en España, la primera en mujeres y la segunda en hombres. Se detectan aproximadamente unos 116 mil casos nuevos al año, dentro de los cuáles fallecen unos 33 mil.
El ACV se produce por la disminución u obstrucción del flujo sanguíneo y como consecuencia hay una disminución del aporte de oxígeno al cerebro.
Hay dos tipos de ictus: isquémico o hemorrágico. El isquémico se da cuando un vaso sanguíneo que lleva sangre al cerebro se encuentra obstruido; el hemorrágico es cuando un vaso sanguíneo se rompe.
Dicha enfermedad es más frecuente a partir de los 55 años y el riesgo va aumentando según lo hace también la edad.
Algunos de los factores que hacen que se pueda producir un ACV son: la hipertensión arterial, los cambios arterioscleróticos secundarios a la hiperlipidemia, las arritimas (por formación de trombos), el tabaquismo, la diabetes y el sedentarismo. Así mismo, las personas de sexo masculino tienen un mayor riesgo de padecerlo.
Además el sufrir un ACV causa una disminución de la calidad de vida debido a las secuelas que se dan a largo plazo como una disminución de la movilidad y afasia.
Así mismo, hay muchas personas que tras sufrir un ictus necesitan a cuidadores que estén con ellos para ayudarles durante su proceso de salud-enfermedad.
Para los cuidadores también es un proceso nuevo y pueden verse sometidos a un estrés permanente, lo que se podría reducir con la educación. Así mismo también pueden experimentar una disminución de la calidad de vida y a una alteración de su rol habitual. Sobre todo tienen deterioro en lo físico y psicológico.
Debido a las consecuencias que genera el sufrir un ACV tanto para el paciente como para el cuidador que se encuentra con él en su día a día es muy necesario que tengan medios y la educación necesaria para poder hacer frente a su nueva situación. En un primer lugar para prevenir las secuelas, y posteriormente para saber manejarlas en el día a día. Dicha educación, conseguiríamos darla a través de un programa educativo.